

Zetta era hasta entonces una empresa española sin una gran historia, y que en 2014 comenzó a vender terminales bastante bien diseñados, con buenas especificaciones y ofrecidos a precios muy interesantes.
Un éxito que rápidamente la convirtió en una empresa de confianza, lo que llevó a muchos usuarios a apoyar la idea de que una pequeña empresa española pueda competir con los gigantes del sector móvil, ofreciendo «interesantes» smartphones a precios atractivos…
Excepto que en realidad, Zetta escondía un gran secreto debajo de su logotipo de «bellota mordida» al estilo de la manzana mordida de Apple: los smartphones fueron diseñados por el fabricante chino Xiaomi.
Y no estamos hablando de smartphones vendidos bajo marca blanca en nombre de Zetta, sino más bien de los teléfonos Xiaomi importados de China cuyos logotipos han sido sustituidos por los de Zetta, que también cambia la forma de las cajas, así como registros para hacerlos pasar por smartphones de producción local.
Un rápido vistazo en el catálogo de Zetta permite ver una gran parte de la gama de Xiaomi. La gama «Conquistador» consiste en realidad en el Xiaomi Hongmi, Redmi Note 2, Note 2 Prime y Redmi 2.
En un intento de encubrir ese escándalo del ‘iPhone extremeño‘, Zetta emitió un comunicado en su página web en el que la empresa intenta afirmar que siempre ha tenido como objetivo proporcionar soporte de software a sus productos, sin hablar de hardware… excepto que la promesa fue ofrecer un smartphone (o más en este caso) 100% diseñados y fabricados en España.
El caso podría no detenerse allí, ya que ahora Xiaomi podría demandar a Zetta. Sin embargo, la marca China todavía no ha hablado sobre este tema.